Google no parece ver el sentido del teletrabajo. Aunque ha promocionado sus movimientos para aumentar la flexibilidad laboral, si dejamos de lado el marketing y nos centramos en los hechos, parece claro que el gigante tecnológico quiere que la mayoría de sus empleados permanezcan cerca de sus escritorios la mayor parte del tiempo. La última prueba: el ayuntamiento de San José (California) acaba de aprobar el plan de Alphabet para construir un megacampus tecnológico en la ciudad californiana que incluye, entre otras cosas, espacio de oficinas para 20.000 trabajadores.
¿Y el Teletrabajo?
La relación de Google con el teletrabajo parecía ser buena cuando, en julio de 2020, la californiana fue una de las primeras empresas en anunciar que ofrecía a sus empleados la posibilidad de trabajar a distancia a largo plazo, hasta este verano, y que además les daba 1.000 dólares adicionales para montar su propia oficina en casa.
Sin embargo, el paso de los meses y la paulatina remisión del virus, especialmente en Estados Unidos, fueron revelando los verdaderos planes de Google. El teletrabajo de julio de 2020 se convirtió en un modelo híbrido un año más tarde, a principios de mayo de 2021, con muchas restricciones: tres días en la oficina y sólo dos días a distancia para el 60% de la plantilla, con un 20% de trabajadores presenciales todo el tiempo y otro 20% trabajando totalmente a distancia, y un ajuste salarial en función del destino para los empleados que decidieran teletrabajar.
Ahora, la aprobación del proyecto del megacampus de San José revela que los californianos no sólo reducirán su espacio de oficinas en previsión de la disminución de empleados debido al teletrabajo, sino que lo aumentarán con 20.000 puestos adicionales in situ. Además, esas instalaciones incluirán viviendas para los trabajadores y todo tipo de comercios, desde cafeterías hasta supermercados, una especie de Google City dentro de la ciudad de San José que mermará algunas de las ventajas de trabajar desde casa, como el ahorro de tiempo en los largos desplazamientos.
Cierto es que Google inició los trámites para el proyecto de San José en 2017, mucho antes de que Pandemia popularizara el modelo de teletrabajo. En esos cuatro años, sin embargo, los californianos han tenido que presentar documentos al ayuntamiento periódicamente, con varias actualizaciones de los planes, la última en octubre de 2020 y en marzo y abril de 2021, con el coronavirus ya entre nosotros, en los que no han cambiado su idea de construir oficinas con capacidad para 20.000 empleados.
El campus en San Jose
El campus que Google planea construir en San José se llamará Downtown West y ocupará más de 32 acres de terreno en el centro de la ciudad. Será la primera instalación del gigante tecnológico que incluirá viviendas exclusivamente para los trabajadores y otros espacios recreativos, como parques o restaurantes. Según el plan presentado por Alphabet, el campus tendrá unas 4.000 viviendas para sus trabajadores, así como 300 habitaciones de hotel y 800 residencias temporales para alojar a los invitados de negocios de Google.
Los californianos aún no han desvelado cuánto costará este proyecto a sus arcas, pero según la cadena de televisión estadounidense CNBC, sólo por construir la infraestructura y sin incluir las oficinas, Google tendría que pagar unos 1.000 millones de dólares, a los que habría que sumar algo menos de 500 millones en impuestos e inversiones para la ciudad, como el transporte público in situ.
Está previsto que la construcción del campus Downtown West de Google en San José comience el año que viene, con un plazo de ejecución que oscilaría entre 10 y 30 años.